Humanos, elfos, feéricos y mareas conviven en la bulliciosa ciudad de Luzaria. Pero cuando el Toque de Queda suena, las calles quedan desiertas y en el oscuro barrio amurallado de Noctia, las puertas se abren: nigromantes, brujos, vampiros, licántropos y demonios pueden campar a sus anchas por la ciudad lúzara al amparo de la Ley Común, que justifica cualquier acción que lleven a cabo entre la medianoche y el amanecer.

Y es que lúzaros y noctis llevan años impulsando acciones con el fin de potenciar los lazos entre ambos mundos, separados solo por el enorme muro que encierra Noctia en su interior: el imperio de la noche. La Ley Común engloba también el denominado Intercambio.


June es una joven humana que pasará el próximo año de su vida viviendo en Noctia, mientras que Tayr, un enigmático brujo, lo hará en su casa, bajo su techo y junto a su hermano Adrien, cuya curiosidad hacia él crecerá al mismo tiempo que una incontenible atracción, pero. ¿Quién es realmente Tayr?

Los dos protagonistas vienen de mundos muy diferentes; uno, de los Reinos de la Luz, donde moran elfos y feéricos, junto a humanos y mareas. Estrechamente unido a la naturaleza, a la pureza. El otro pertenece al Imperio de la Noche, un mundo oscuro de guerras, traiciones y venganzas. Espada y flores los representan a la perfección.